Estas semanas han sido muy especiales para mí. Al principio todo es emocionante por todo el mundo que conoces en tan poco tiempo. Ahora eso se suma a tener amistades de verdad con la gente de aquí.
Seguro que sabrás como me siento ahora. Es como cuando llegué al colegio por primera vez. Me había mudado de ciudad y no conocía a nadie. Nada más llegar nos pusimos a colorear unos dibujos (intentando no salirme de los bordes) y un niño me prestó todas sus ceras de colores. Jajajaja pues ahora es igual.
Esta mañana hace un frío de estos que hiela hasta las orejas pero tienes que ver el otoño aquí. El bosque, la ciudad, los colores...
Hace dos días estuve en Varsovia y disfruté muchísimo. Fuimos a un partido de fútbol del mejor equipo de Polonia (Legia Warsawa). El estadio estaba lleno y el ambiente ponía los pelos de punta. A veces me quedaba mirando a los ultras de los equipos y me olvidaba del partido. Era increíble como animaban, sus canciones, sus gestos y sus caras.
Al final el Legia perdió 0-1 injustamente, la próxima vez ganaremos.
Estos últimos días los profesores nos mandan más trabajo y tareas porque quieren evaluarnos pero no hay que preocuparse mucho. Solo tenemos que hacer algunas redacciones y exámenes.
Las clases de educación física siempre me gustan. Estamos haciendo juegos de equipo todo el rato y nos lo pasamos muy bien.
Pero el otro día acabé muerto. Cuando empezó la clase me dijeron que íbamos a jugar un partido de balonmano. Y aunque no tengo ni idea de jugar me gusta mucho. Jugamos contra el equipo de las chicas del colegio. Y chica paliza nos dieron, no paraban de tirarnos al suelo y nosotros no parábamos de correr jajajaja. Al final me fui alegre (y reventado) porque metí 5 goles y quedamos 8 - 8.
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